martes, 17 de septiembre de 2024

Deseo en su más Etérea Forma…

Los bares que elegían para sus encuentros eran apenas escenarios en los que se desplegaba algo más profundo, algo oculto entre la música, el humo y las risas ajenas. Nowhere Man, con su infatigable elocuencia, tejía con cada palabra una atmósfera que parecía suspender el tiempo. 

Pero, detrás de su ingenio, se ocultaba una contenida fascinación que solo Ma Belle Sirène sabía desatar. Mientras él hablaba, ella se mantenía en silencio, sus ojos capturaban la luz como un etéreo reflejo de lo no dicho.

Entonces, en un imperceptible movimiento, su mano emergía, trayendo consigo el misterio de lo prohibido. Bajo la mesa, su gesto contenía un primigenio poder: desde el íntimo pliegue de su falda, un destello de erotismo se manifestaba en la secreción que ofrecía con una enloquecedora delicadeza. 

Nowhere Man, ante esa ofrenda, respondía con una calma casi mística, llevando su boca al encuentro con una devoción que transformaba lo físico en algo más profundo, más sagrado. Lo que comenzaba como un sensual gesto se convertía en un ritual que fusionaba el erotismo con lo trascendental, donde cada acto llevaba la carga de un simbolismo que solo ellos dos comprendían.

Y, entonces, tus destellos, Laura Elena…

Narrativas Etéreas...

Bajo el velo de la memoria, un puente invisible entre lo que fue y lo que es despliega sus sombras y destellos. Es allí donde la neostalgi...