En la danza de los años, Four-Calendar Café, surgido en 1993, se reveló como el paso inevitable tras Heaven or Las Vegas, marcando la entrada de la agrupación en el vasto universo de un sello británico, Fontana. Con más de una década de sonoridades que oscilan entre la neblina y la luz, los Cocteau Twins se aventuraron a explorar paisajes sonoros más serenos.
La incorporación de Ben Blakeman y Mitsuo Tate, guitarristas que aportaron sus susurros a la atmósfera etérea, presagiaba un nuevo horizonte.
Sin embargo, tras la cortina de ensueño, las sombras comenzaron a cernirse sobre la conexión entre Fraser y Guthrie. El peso de la lucha interna se manifestaba; Guthrie, en un acto de sinceridad años después, desnudaba su batalla contra la adicción, mientras Fraser, en una reveladora entrevista, compartía la fragilidad de su espíritu, marcado por un ataque de nervios y el proceso de sanar.
Este cambio de rumbo comenzó a plasmarse en las letras, donde la ensoñación se anclaba en palpables realidades.
En el cierre del álbum, “Pur”, resuena una delicada oda a Lucy-Belle, la luz en la vida de Fraser y Guthrie. No obstante, es en “Bluebeard” donde la esencia de la dualidad se destila: “¿Eres la adecuada para mí / o eres tóxica para mí?” La pregunta reverbera, encapsulando la melancolía y la dulzura de uno de los trabajos más complejos y emotivos del grupo.
