Las señales que encontraba a su paso eran advertencias que no lograba descifrar. Desafiarlas parecía su único refugio, aunque al final del camino lo único que quedaba era la sombra del amor que lo había traído hasta aquí.
En ti veía un reflejo tan real, pero también vulnerable, como si ambos estuvieran atrapados en un distorsionado espejo.
Intentaba abrir los ojos, los suyos y los tuyos, tratando de comprender si aquel amor era lo que lo sostenía o lo que lo hundía.